Cómo empezó todo esto
En realidad, comenzamos dando clases en un parque cerca de la colonia. Solo éramos tres personas al principio. Alguien trajo una manta extra, otro llevó té, y así fue como descubrimos que el yoga no necesita ser complicado.
Lo que más nos sorprendió fue ver cómo personas sin experiencia previa encontraban su propio camino. No todos querían hacer posturas avanzadas. Algunos solo buscaban estirar un poco después del trabajo.
Para finales de 2023, ya teníamos un pequeño estudio en Aguascalientes. Nada ostentoso, pero con buena luz natural y suficiente espacio para respirar. Y sí, seguimos ofreciendo té después de las clases.